lunes, 9 de noviembre de 2015

interactividad

El otro día, escuchando "JELO", Julia remarcaba que daba paso a los oyentes porque luego va la gente y se queja de que solo le da bola a la gente que tiene Twitter. El tema de hoy no va otra vez de lo de la "twitterdependencia" (que no es el caso), sino de una falacia que se ha establecido en la radio: la de la hiperinteractividad. 

Es verdad que la gente puede interactuar por Twitter, el Facebook, mediante cartas, el e-mail, postales, señales de humo, mensajes en un contestador... Cierto. La gracia de Twitter es que es como un chat en tiempo real. La persona que está haciendo el programa puede medir -con los lógicos filtros y cautelas- lo que interesa al personal. Al menos, lo que le despierta ganas de escribir al programa. Esos mensajes -y ahí está la interactividad- son leídos por el equipo del programa o por quien presenta, y... ya está. 

La gente se queja de no poder intervenir más que por vía Twitter. Yo me quejo porque, desde el punto de vista del oyente, los mensajes de Twitter no son del todo radiofónicos... 

Quiero decir que son mensajes que en realidad responden a un cierto estímulo, y además tienen respuesta desde el programa. Es decir, que tú puedes dejar un comentario, lo pueden comentar los contertulios, pueden dar lugar a un debate, o pueden dar lugar a una pregunta para un entrevistado. Correcto. Pero de ahí no pasa. La verdadera interactividad, o mejor dicho, la interactuación más completa, se lleva a cabo cuando el oyente interviene por teléfono. Porque puede explicarse, y porque esa idea que ha expresado por mail o por micromensajería luego puede tener una réplica. Puede dar lugar a una verdadera interacción entre las personas. Leer un mensaje de un oyente... es mucho más pobre, por definición, que dar voz a un oyente, por muchos riesgos que esto implique. Y trabajo. 

Si quieres dar al oyente un colorario de lo que dicen... Pues explicas un poco los tuits. Pero si quierenque un par de personas puedan expresarse e interaccionar de manera verdadera... Que llamen. Y si lo que dicen aporta poco o es un coñazo... ¡Gracias, amigo! Y a por otro. 

No hay nada más intenso que la interacción con las personas. Pero no hay nada más cómodo que dejar que llamen los oyentes para que rellenemos la antena. No hay nada más emocionante que un testimonio en el momento preciso. No hay nada más coñazo que un oyente que se enrolla con un tema personal. No hay nada que dé mejores momentos de radio que los momentos con los oyentes. No hay nada más coñazo que escuchar a una retahíla de oyentes que no tienen nada que decir. 

¿Dónde está el punto medio? Supongo que depende del tipo de audiencia y de la capacidad que tenga el presentador de "jugar" con la audiencia. Y del momento. No sé... Supongo que es una cosa de "sensibilidad radiofónica". De que sepa el que lleva el programa cuándo conviene y cuándo no. 

Y luego están los programas que se basan en las llamadas de los oyentes de manera temática. Aquí el presentador es el que tiene que tener "un algo" por obligación. ¿Os acordáis de la entrada que hice sobre "la llamada del suicidio"? Gemma tenía que lidiar en el "Hablar por Hablar" con todo tipo de oyentes. Aquel radiochip era muy interesante, también, por la manera que tenía Gemma de ir entrando en las historias, la manera de preguntar... Era un estilo de "chica pizpireta" que creo que jamás se ha vuelto a repetir de noche. Un estilo que no heredaron las que vinieron después. 

Hablé también un día de "Momentos". Ese programa de la COPE en Cataluña que luego ha pasado a emitirse en toda España una vez por semana también de madrugada. Las claves del programa son dos: la interacción de Luis Rodríguez con los oyentes, y el montaje posterior que hace con las llamadas. El radiochip de hoy va de cuando en "La Mañana" comentaron una de las llamdas que se supone que evitó el suicidio de una oyente de Castelldefells. Radiochip extremo:



Digo radiochip extremo, porque obviamente esto sería el extremo del "llamadismo". No estoy diciendo que los programas tengan que tener llamadas y que además sean extremas... He elegido este radiochip por eso de mostrar que "por encima de una llamada es muy difícil que haya nada". 

Con esta entrada solo quiero expresar que las llamadas sí son interactividad total, y que leer mensajes es interactividad que en el fondo está limitada. No se obtiene respuesta del oyente cuando le responden en antena. Es cierto que las redes son interactividad... pero limitada. 

Que no capen las llamadas en favor de los tuits. No rellenen programas con tuits. No hagan programas que rellenen con llamadas. No hagan programas donde necesariamente tengan que tener vias de interactividad... No siempre es necesario. Pero cuando hablen de "interactividad", que no piensen en las radios que por tener un correo y una cuenta de Twitter interactúan con los oyentes... A los oyentes nos gusta escuchar a otros oyentes de vez en cuando, aunque "solo interactúe uno". De manera real. 

6 comentarios:

  1. Yo vengo a comentar un tema que traté anoche en twitter con Radiochips y compañía. Leía yo en un twitter a Richard Dees, señor que hace un podcast donde es muy crítico con los periodistas deportivos, que hablaba de una llamada que hicieron en "Tiempo de Juego". La cosa consistía, por lo que luego escuché, en que llamaban a un Valbuena al azar tirando de guía telefónica para preguntarle por el tema de Benzema y el chantaje.

    El problema fue, según cuentan, que llamaron a una señora y el señor de apellido Valbuena era su marido y estaba muerto. Parece ser que hubo risas posteriores a ese momento y la cosa quedó poco respetuosa. Cuando lo comentaba en twitter, yo fui a comprobarlo y creía que era mentira porque no encontraba la famosa llamada, pero dos oyentes me confirmaron que era verdad... luego esa llamada no figuraba en el podcast.

    Así he llegado a una valoración personal y a una pregunta. Sobre lo primero, me reafirmo que a la gente de "Tiempo de juego" el "tonteo" se les fue de las manos hace tiempo (aunque hay que decir que luego, fuera de antena, llamaron a la señora para disculparse) y, lo segundo, y lo que quería plantear después de todo el rollo es: ¿Está justificado borrar la llamada del podcast si se considera que se ha actuado mal, puede ser hiriente para la señora? Conste que no lo tengo claro, solo lo planteo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo he oído y creo que simplemente fue una cosa que pasa... Pero en cuanto lo suba (en el futuro) lo comprobarás... :)

      No fue nada del otro mundo.

      Eliminar
    2. Para no ser una cosa del otro mundo, bien que lo han borrado del podcast.

      Eliminar
    3. Pero si tú mismo has dicho que no tienes claro si está bien borrarlo o no! xd

      Eliminar
    4. No tengo claro si hay que borrarlo si le damos importancia.

      Eliminar
  2. Totalmente cierto. Al menos, los programas que escucho, dan cabida sólo a tuits, pero dedican como 20 o 30 segundos cada hora a leer algún tuit. Algo rápido y que no tenga mayor protagonismo.

    En la radio española me falta un buen productor que sepa filtrar llamadas y pasar sólo lo mejor a antena. Esto lo hacían en 'En tu casa o en la mía', donde tenías una charla con producción para saber si te metían al aire, y así aseguraban que sólo entraban llamadas interesantes.

    ResponderEliminar